UTIER CATALOGA DE PREMIO POLÍTICO NOMBRAMIENTO DE VANCE THOMAS A LA JUDICATURA

(San Juan, Puerto Rico- 18 noviembre 2016)- La Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER) denunció como un premio político la recomendación que hiciera el gobernador Alejandro García Padilla sobre el Secretario del Trabajo, Vance Thomas, para ocupar un puesto como juez superior.

"Vance Thomas tuvo una nefasta ejecutoria como Secretario del Trabajo atentando contra la justicia y la salud y seguridad de un sector tan importante como somos los trabajadores, por lo que no se justifica su recomendación para un puesto en la judicatura. Durante su paso por la Casa de los Trabajadores en este cuatrienio, Thomas se hizo de la vista larga ante la aprobación de estatutos como la Ley 4 y la Ley 66 de 2014 que tan nefastas han sido para la clase obrera. Su proceder en esos momentos fue de silencio. En otros casos fue ambivalente ante decisiones importantes que debió tomar, cuando trabajadores de diversos sectores se lanzaron a la calle a reclamar sus derechos. Su incumbencia dejó el precedente más nefasto que ningún otro Secretario anterior al confabularse con el patrono en contra de decisiones importantes para la salud y seguridad de los trabajadores de la energía eléctrica. Esa ambivalencia que lo caracterizó fue para no tomar ninguna decisión que fuera conflictiva con su ambición de ser juez. Puso por encima su interés personal ante el interés colectivo de los trabajadores. Por eso estamos convencidos de que su recomendación para la judicatura no es otra cosa que un premio político del gobernador. Estamos seguros de que su nominación es la de otra batata política más de las tantas que nos tienen acostumbrados a nombrar los gobernadores a finales de su término y éste gobierno no ha sido la excepción", denunció el presidente de la UTIER, Ángel Figueroa Jaramillo.

Entre las ejecutorias de Thomas como Secretario del Trabajo, Figueroa Jaramillo detalló algunas que experimentó la UTIER. "Thomas pretendió que todos los casos del comité de querellas de la UTIER que fueron presentados ante el Negociado de Conciliación y Arbitraje del Departamento del Trabajo, que son muchos, siguieran su curso normal, aun cuando la licencia sindical de la UTIER fue dejada sin efecto debido a la Ley 66 de 2014, lo que impedía la presencia de los representantes de la UTIER en esos casos. En esa ocasión y ante la negativa de los árbitros de ejecutar sus órdenes y en un acto sin precedentes, Thomas sancionó a 14 de 16 árbitros de su propio Departamento que se negaron a seguir esa orden injusta y les formuló cargos suspendiéndolos de empleo y sueldo por dos semanas. La UTIER denunció ese hecho que representó una práctica nefasta de intervención con la libertad de criterio de los árbitros que atienden controversias obrero patronales", enfatizó el dirigente de la UTIER.

Otro acto reprochable de Thomas que detalló Figueroa Jaramillo fue el que "en contubernio con la alta gerencia de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) redujo las citaciones y penalidades emitidas por la agencia de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA por sus siglas en inglés) en casos de accidentes del trabajo, negándole participación activa a la UTIER en esos casos". El efecto de esa injerencia de Thomas en esta ocasión, aseguró el dirigente obrero, tuvo como resultado el que se cancelarán los esfuerzos que había realizado la UTIER en beneficio de los trabajadores a la hora de accidentes y fatalidades en el trabajo a través del Comité Central de Salud y Seguridad que comparte con el patrono. Como consecuencia de la ejecutoria de Thomas, se eliminaron o redujeron las multas y penalidades que deberían aplicar al patrono tras aquel fatídico accidente en la Planta de la Central San Juan, en la que fallecieron dos compañeros y otros dos fueron heridos de gravedad.

Para la UTIER, añadió Figueroa Jaramillo, los ejemplos de la nefasta ejecutoria de Thomas demuestran que no tiene el temperamento judicial que se requiere para ser un juez justo que respete los derechos de todas las partes y no sólo los de los más poderosos". La UTIER conocía desde hace años el interés de Thomas de ser juez, por lo que no los tomó por sorpresa la noticia. A eso le acreditan el que evitará decisiones conflictivas y que nunca opinara sobre temas importantes que afectaron a la clase obrera. Mucho menos, que actuara con transparencia. Muestra de ello, añadió, fue al salir del Tribunal Federal cuando fue citado ante un Gran Jurado en el caso de Anaudi Hernández. Para entonces y ante preguntas de la prensa, dijo que aunque no le habían advertido que no debía dar declaraciones sobre el interrogatorio, prefirió no hablar de las preguntas que le hicieron.

"Para la UTIER, que hemos lidiado con todos los secretarios del Trabajo en los últimos 30 años, podemos decir sin lugar a equivocarnos que Thomas ha sido el peor de todos, el más anti obrero y el que peor relación ha tenido con los obreros y con sus propios trabajadores en el Departamento del Trabajo. Por eso no conseguirá a nadie que hable bien de sus ejecutorias. Sólo lo defenderán los que lograron su servilismo", terminó diciendo el Presidente de la UTIER.